lunes, 17 de septiembre de 2018

Paz Durán: “Es un honor que yo esté siempre en Destroyers”

El arquitecto Carmelo Paz Durán fue nombrado como presidente vitalicio de Destroyers, en el festejo que se realizó ayer por el aniversario 70 del club en la sede campestre del kilómetro 7 y medio al norte, que contó con la participación del titular de la Federación Boliviana de Fútbol (FBF), César Salinas.

Bajo el mando de Paz Durán, Destroyers ascendió a la División Profesional en 2004 después de realizar un esfuerzo económico para rescatarlo de un momento crítico a nivel institucional.

“Un honor, una honra en todo sentido de que yo esté siempre en Destroyers. Realmente me llena de orgullo”, dijo el flamante presidente vitalicio.

Pese a estar al margen de la dirigencia, Paz Durán ha mostrado amor por Destroyers con aportes de manera silenciosa para sanear el complejo deportivo y la economía de la institución, que ahora está presidida por Robert Blanco.

HISTORIA DEL CLUB

Destroyers fue fundado el 14 de septiembre de 1948. Para nombrarlo, los fundadores se inspiraron en una película de la Segunda Guerra Mundial en la que apareció en escena un acorazado en cuya proa se leía ‘Destroyer’. Debido al característico color amarillo de la indumentaria es llamado canario y también Máquina Vieja por el barrio cruceño en donde se estableció inicialmente.

Cuando se creó la Liga de Fútbol Profesional Boliviano en 1.977, Destroyers desiste de la invitación por fidelidad a la asociación a la que pertenecía. Sin embargo tras consolidarse la Liga como crisol del profesionalismo, desde ese año pelearía el ascenso a dicha competición.

El equipo canario volvió a primeros planos en 1.984, logrando el ascenso a la Liga, de la mano del técnico Miguel Oliva, tras ganar a Guabirá. En el profesionalismo, la Máquina Vieja funcionó bien de entrada. En sus filas tenía a futbolistas que luego tendrían una excelente trayectoria nacional e internacional, tales como, Carlos Leonel Trucco, Omar Beccérica, Carlos Aragonés, Miguel Aguilar y Federico Justiniano entre otros.

En 1988 acaparó la atención cuando llegó a una semifinal del campeonato nacional con jugadores de la talla de Erwin Sánchez, Marco Antonio Etcheverry y Mauricio Ramos, quienes conformaron el ‘trío de oro’.

Tras la migración de sus figuras en la década de los 90, los destroyanos casi siempre vieron al equipo acosado por el descenso.

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